Mi mayor compromiso es servir con responsabilidad, honestidad y humildad desde la función pública, teniendo siempre en cuenta que no importa el cargo, si no el encargo, y el encargo siempre será servir a la nación. Ya sea desde la mas alta tribuna o a ras de piso, el deber es construir una nación en donde todos tengamos acceso a las mismas oportunidades, difundir los valores y la esencia de la cuarta transformación y defender la democracia de toda acción conservadora.
El camino recorrido hasta ahora no ha sido fácil, ha sido un camino de lucha y resistencia, se ha mantenido una constante lucha en contra del viejo régimen conservador que se ha empeñado en saquear y obstaculizar el crecimiento de esta gran nación.
Mi recorrido empieza desde que inicié la licenciatura en economía de la Universidad Autónoma de México, posteriormente realicé la maestría en finanzas públicas en el Instituto Nacional de Administración Pública. Fue entre los años 2000 y 2005 cuando por nombramiento del entonces jefe de gobierno y ahora presidente de México, Andrés Manuel López Obrador me desempeñé como director de Adquisiciones de la Oficialía Mayor del Gobierno de la Ciudad de México.
En el año del 2005 renuncié a mi cargo como director de adquisiciones para unirme a la campaña presidencial del licenciado López Obrador, campaña en donde se ganó de manera arrasadora en donde millones de mexicanas y mexicanos votaron por un cambio de régimen, por poner un alto al saqueo y corrupción encabezado por los gobiernos conservadores, sin embargo, el triunfo nos fue robado, y el movimiento fue mancillado por los medios de comunicación al servicio del conservadurismo.
Luego de un sexenio marcado por la corrupción y por miles de muertes provocadas por una fallida guerra contra el narcotráfico, de nuevo acompañé al licenciado López Obrador en la contienda electoral del 2012, de nueva cuenta el triunfo nos fue arrebatado por la compra de votos y la rapas corrupción, la democracia de nuevo daba un paso atrás.
La corrupción estaba impregnada en todos los sectores de la vida pública de México, y no solo emanaba del gobierno federal en turno ni en los partidos conservadores, también se encontraba dentro del partido que en ese momento se posicionaba como una simulada oposición, por lo tanto, después de la derrota del 2012, cientos de militantes del PRD, decidimos renunciar al partido para cimentar un nuevo movimiento.
El 20 de noviembre del 2012 constituimos un movimiento conformado como asociación civil, que pretendía construir desde cero los cimientos de la democracia con una clara ideología de reformismo y unidad nacional con la firme convicción de sanear y reformar el país, un Movimiento de Regeneración Nacional.
Cuando se es idealista y las convicciones son fuertes, los recursos financieros no son un impedimento cuando no los hay, por lo tanto, el Movimiento de Regeneración Nacional empezó a caminar a paso firme y sin detenerse. Fuimos casa por casa a lo largo del territorio nacional a repartir el periódico Regeneración y a concientizar a la población de nuestra propuesta política. Fue hasta el 26 de enero del 2014 cuando el Movimiento de regeneración Nacional pasó de ser una asociación civil a convertirse en un partido político.
Dentro de la estructura del partido tuve la responsabilidad de desempeñarme como secretario de Organización y secretario técnico del consejo Nacional de MORENA.
Luego de otro sexenio marcado por una sínica corrupción encabezado por el expresidente priista Enrique Peña Nieto, la nación se encontraba en una crisis política sin precedentes, los estallamientos sociales como la guerra de autodefensas en Michoacán, la desaparición de los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa y los actos sínicos de corrupción perpetrados por la misma familia presidencial como fue el escándalo de la Casa Blanca de Peña Nieto y de mas escándalos de corrupción, hicieron que el pueblo de México llegara al hartazgo y urgiera un cambio en su forma de gobierno.
La contienda electoral del 2018, fue histórica, México optó por el Proyecto Alternativo de Nación encabezado por el Licenciado Andrés Manuel López Obrador, y desde entonces hasta la fecha, hemos estado trabajando para reconstruir esta gran nación.
Dentro de la Administración federal tuve el honor y el gran encargo de asumir el cargo de Coordinador General de Programas para el Desarrollo. Posteriormente decido regresar al Senado de la República para seguir construyendo y fortaleciendo las bases de la democracia.
Me mueve el amor al pueblo y el ideal de construir la vida comunitaria en todo el país, figuras como Lázaro Cárdenas y Don Vasco de Quiroga son mi inspiración para servir al país de cualquier trinchera. Hoy lo que sigue para mi es retomar la esencia de los valores de la Cuarta Transformación y seguir construyendo la democracia, difundiendo la importancia de la unidad y la organización, por que como lo dijo alguna vez Ricardo Flores Magón y el presidente Andrés Manuel López Obrador; Solo el pueblo puede salvar al pueblo, pero solo el pueblo organizado, puede salvar a la Nación.