Recuerdo la primera asamblea informativa del Lic. Andrés Manuel López Obrador como Presidente Legítimo de México después del fraude electoral del 2006, fué un 5 de enero del 2007 en Dzilam de Bravo, un poblado de pescadores en la Península de Yucatán y tan solo con 10 participantes reinició la travesía de recorrer todos los municipios de México para informar, escuchar y construir un Proyecto de Nación, así como la organización popular más grande de la historia para transformar a nuestro País.
En esos tiempos, ¿dónde estaban?, ¿qué hacían? y ¿en qué contribuyeron los posibles sucesores del actual Presidente? Verán, Claudia Sheinbaum se ocupó de coordinar varios Estados y fungir como Secretaria de Medio Ambiente del Gabinete Legítimo, encabezó la Defensa del Patrimonio Nacional con las inolvidables “Adelitas” y caminó casa por casa en Tlalpan hasta lograr una de las primeras victorias electorales (2015), hoy encabeza el gobierno local que más ayuda a los estudiantes y personas con discapacidad; Marcelo Ebrard gobernó la Ciudad de México (2006-2012), en sus primeros tres años fue el único gobernante que reconoció la legitimidad de nuestro movimiento y en 2009 tomó protesta a los primeros Comités Municipales del movimiento; Adán Augusto siempre organizó de todo en el sureste del País, supe de tantas encomiendas que no cabrían aquí, el Presidente ha recargado en él, la política interna cuya responsabilidad requiere del principal patrimonio moral: la confianza. El Dr. Ricardo Monreal, me consta que fue el Senador (2006-2012) que abanderó la resistencia al interior de la cámara alta, promovió el Proyecto de Nación y la defensa de la soberanía, siempre polémico y crítico, pero respetuoso y sincero con AMLO, después del fraude en 2012, denunció la compra del voto del PRI, y es fundador de MORENA. En los tiempos del Pacto por México (2012-2015) se mantuvo inquebrantable, cómo olvidar que personajes de la llamada nueva izquierda se alinearon de manera servil al viejo régimen, ahora algunos de ellos, conversos al morenismo, le atacan con vehemencia, se equivocan, ya que su oficio y estilo ha sido fundamental para tener interlocución con las diversas fuerzas políticas, sostengo que el movimiento lo necesita y él necesita del movimiento.
Decidí reflexionar sobre lo bueno porque soy testigo de ello, creo que el agradecimiento es la memoria del corazón y ahora este camino de la transformación tiene como objetivo superior la unidad genuina entre compañeras y compañeros, sí podemos reconciliarnos y regresar a nuestra esencia: el amor al pueblo, la humildad
para servir, conservar la confianza de la gente y practicar la Democracia en todo y para todo; el actual Presidente de México sembró estas ideas en ese pueblo de pescadores hace 3 lustros y siempre encontramos la manera de tener un nuevo comienzo gracias a
la más fuerte de las virtudes: La Esperanza, así podremos profundizar y continuar con nuestra Cuarta Transformación.
En próximas fechas se renovará la mesa directiva del Senado de la República y es la oportunidad para demostrar que no existen cargadas, ni preferencias, tampoco componendas y repartos que privilegien la simpatía de los opositores al movimiento, estos últimos ya demostraron su traición y esperan nuestra división y fractura, en este sentido quiero proponer, respetuosamente, un giro al procedimiento de elección interna de Morena y fracciones aliadas, respecto a quién podría presidir la mesa en el siguiente periodo legislativo:
- Que los interesados sean propuestos por escrito por un mínimo de 8 Senador@s.
- Que se consulte a los postulados si se puede llegar a un consenso.
- De no lograrse el consenso, proceder a una insaculación o sorteo entrepostulados.
Tengo la convicción que este método nos fortalecerá como movimiento, se evitaría la medición de fuerzas al interior de morena y con ello la confrontación, daría oportunidad a los partidos aliados de participar y demostrar la pluralidad y apertura que debe caracterizarnos.
